divendres, de novembre 24, 2006

Sobre La Metamorfosis de La Fura i Javier Daulte

Sin lugar a dudas, los diferentes recursos visuales i escenográficos, sello de La Fura, es parte de lo más destacable de la obra.
De hecho, el escenario es una continua metamorfosis de juegos visuales, cámaras i movimientos del cubículo transparente que es el caparazón de Gregor que mantenien al espectador en un estado de atención casi contínuo.

Una diferencia importante con la novela es la percepción de La metamorfosis. En la novela, Kafka nos situa dentro de la habitación, nos hace partícipes de lo que le sucede a Gregor que es la víctima de la situación, sin embargo en la obra teatral, la percepción se realiza desde
fuera de la habitación, Gregor "decide" aislarse de su entorno que queda claro que le repugna i nos "habla" a través de la interpretación gestual de Rubén Ametllé
i de imágenes de video. Este detalle, me ha parecido muy interesante porque de hecho, es el mismo problema, visto de manera complementaria.

La propuesta que propone Ollé i Dualte es evidentemente atrevida i compleja, ya que pretende encontrar causas a la metamorfosis en la sociedad de hoy en día. En la actualidad, -coincido con los autores- sigue absolutamente vigente el tema kafkiano del "bicho raro", ahora
bien es necesario buscarle las causas a la metamorfosis? Yo creo que no. Lo que me resulta interesante de esta idea de Kafka es la facilidad con la que podemos llegar a sobrepasar la frágil linea imaginaria que separa el estar dentro o fuera de la habitación de Gregor.
Las causas son infinitas i aunque muchas puedan ser comunes, cada uno tendrá las suyas. Intentar justificar con alguna causa el comportamiento de Gregor como sucede en el espectáculo creo que resulta un proceso de simplificación prescindible.

Notas:
ON
La cotidianidad de los cuatro personajes principales, además están bien interpretados.
El "happy end" al estilo de cómic satírico.

OFF
El personaje del compañero de trabajo, un "matxambrat" de ideas sin cuajar.
La escena del cine, realizada para dar sensación de interactuación con el público acaba siendo burlesca.